“GF: Nuestro caso de estudio es Campo del Cielo y nuestra obra en términos generales gira en torno a él. Y en ese universo, Decomiso se orienta a los aspectos legales de Campo del Cielo. No es una serie, pero sí se inscribe en cierta órbita de trabajo en relación a nuestro caso de estudio.

En los años 20 hubo una consulta al Procurador General de la Nación acerca de cuál era la protección legal de los meteoritos, porque ya había leyes que protegían fósiles y creo que restos arqueológicos. Rodríguez Larreta dictaminó que los meteoritos no tenían ninguna protección específica del Estado y que correspondían a los dueños de los campos donde se habían encontrado. En los 60 inició las campañas de exploración a Campo del Cielo una misión norteamericana con socios argentinos. La respuesta de la sociedad chaqueña fue proteccionista, creando una Asociación de Amigos del Meteorito que fue bastante reaccionaria a las investigaciones y salidas de meteoritos del país. En los 90 hubo un evento clave, que fue un intento de robo del meteorito Chaco, el más grande que se había desenterrado en Campo del Cielo. Tuvo mucho impacto en la sociedad chaqueña y derivó en una ley de protección de los meteoritos, que una vez reglamentada no tuvo ninguna implicancia real. Continuó la cosecha y contrabando de meteoritos, pero al menos se lo declaró ilegal. Decomiso configura un tema de Campo del Cielo, que es la protección legal y patrimonial de los meteoritos.

Hace tiempo seguimos alertas de Google cuando salen noticias de Campo del Cielo o comentarios en blogs. Empezamos así a recibir anuncios de que había habido un decomiso en Campo del Cielo en el 2014- 2015 y reaccionamos a eso buscando el origen de ese decomiso, que era la Fiscalía de Estado de Santiago del Estero. Nos pusimos en contacto con la gente que aparecía nombrada, hablamos por teléfono, tuvieron un trato cordial pero siempre un poco distante. A fines de 2015 fuimos a Santiago del Estero a entrevistarnos con el Fiscal de Estado. Requirió tres viajes lograr esa entrevista, y en esos tres viajes fuimos desarrollando cuál iba a ser nuestra línea de acción, qué íbamos a decir en la entrevista más allá de presentarnos y presentar nuestro trabajo. Ya teníamos más de ocho años de trabajo en Campo del Cielo y dos libros publicados, entonces eso respaldaba nuestro acercamiento de por qué estábamos ahí. Y en esos viajes pudimos desarrollar que lo que queríamos hacer era indexar esos meteoritos decomisados y darles un estatus patrimonial de protección más alto a través de la identificación pieza por pieza.

Lo que es clave de Decomiso es que a diferencia de los otros proyectos que le daban visibilidad a los grandes meteoritos de Campo del Cielo que tienen nombre y tienen un lugar, Decomiso les da visibilidad a todos los otros meteoritos que se cosechan y se contrabandean y encuentran su destino en colecciones o como suvenires, son como las piezas sin nombre de Campo del Cielo. Comunica e informa el aspecto legal sobre todos los otros meteoritos. La historia de Campo del Cielo se cuenta con una docena o un poco más de meteoritos y lo que sucede aquí es que echa luz sobre estos 405, que representan miles y miles de meteoritos que están desparramados por todo el mundo”.